
A pesar de esa sincronización de hechos adversos, Frankl pudo sobrellevarlo. Cuenta que tenía un manuscrito con anotaciones teóricas y eso le daba sentido para continuar a pesar de haber perdido a sus familiares. Visto desde la actualidad, pues mejor que no vuelva a pasar nunca. Por otro lado, constituye una literatura de gran calidad y una explicación de las vivencias excelente, independientemente de la logoterapia.